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La última generación de dispositivos plegables de Samsung está con nosotros. Samsung, la compañía surcoreana reina de la tecnología vuelve a pisar fuerte con estos móviles que no dejan indiferente a nadie.
Han lanzado el Samsung Galaxy Z Fold5, ideal para aquellos que desean una tablet de bolsillo, y el Samsung Galaxy Z Flip5, perfecto para quienes prefieren un teléfono móvil de dimensiones convencionales pero que ocupe menos espacio. Viva la nostalgia flow 2000.
El Samsung Galaxy Z Flip5 es el que ha experimentado la mayor evolución de una generación a otra. Después de usarlo durante un tiempo vamos a compartir contigo un análisis de esta emocionante incorporación de Samsung.
Antes de empezar a contarte nuestra experiencia con el móvil plegable más potente de Samsung (junto al Galaxy Z Fold5), aquí te dejamos las especificaciones del terminal para los más frikis de la tecnología que quieren saberlo todo del Samsung Galaxy Z Flip5.
| Samsung galaxy z FLIP5 | |
|---|---|
| DIMENSIONES Y PESO | Plegado: 71.9 x 85.1 x 15.1mm |
| PROCESADOR | Qualcomm Snapdragon 8 Gen 2 for Galaxy |
| PANTALLA | Externa: Resolución (2640 x 1080, 22:9) |
| CÁMARA TRASERA | Principal gran angular de 12 MP Cámara ultra gran angular de 12 MP |
| CÁMARA DELANTERA | Cámara de 10 MP |
| MEMORIA | 8 GB RAM |
| SISTEMA OPERATIVO | Android 13 |
| BATERÍA | 3.700mAh |
| CONECTIVIDAD | 5G SA/NSA |
| BIOMETRÍA | Lector de huellas lateral (en botón) |
| OTRO | Resistencia al agua IPX8 |
La gran pantalla externa del Samsung Galaxy Z Flip5 ha demostrado ser muy útil, ya que te permite utilizar aplicaciones como WhatsApp, Google Maps y YouTube.
Aunque no es compatible con todas las aplicaciones Android, cuenta con una selección de widgets y aplicaciones que resultan bastante útiles.
Además, es destacable que Samsung ha incorporado el último chip de Qualcomm, el Snapdragon 8 Gen 2 for Galaxy, lo que convierte al Samsung Galaxy Z Flip5 en el smartphone plegable más potente disponible en el mercado.
Todo esto sobre el papel hace que se nos caiga la baba pero, ¿cómo es en el día a día? Sigue leyendo nuestra review y lo descubrirás.😉
En la nueva familia de dispositivos plegables de Samsung, es evidente que el Samsung Galaxy Z Flip5 es el modelo que más ha cambiado tras diferentes modificaciones.
En resumen, los cambios se centran en tres aspectos clave: la inclusión de una amplia pantalla en la tapa exterior, una bisagra que permite un plegado completo y la actualización del procesador al Snapdragon 8 Gen 2 for Galaxy.
En cuanto al diseño, la nueva bisagra coloca al Samsung Galaxy Z Flip5 en una muy buena posición. Mientras que la generación anterior apenas presentaba cambios en su diseño y se centraba principalmente en actualizaciones internas, en esta generación, el cambio es notorio y significativo.
En cuanto al tema del tamaño, es prácticamente el mismo, pero destaca especialmente su amplia pantalla externa de 3,4 pulgadas cuando se encuentra plegado.
Su diseño es realmente llamativo y, incluso 3 o 4 años después del lanzamiento del primer modelo Flip, sigue atrayendo miradas cada vez que lo abres y cierras.
En cuanto a la pantalla interna, el pliegue está presente, aunque pasa totalmente desapercibido cuando usas el teléfono de forma normal.
Dado que se trata de un dispositivo plegable, es natural esperar la presencia de un pliegue. Samsung asegura una resistencia de más de 200,000 pliegues y despliegues, lo que es un punto a su favor.
La incorporación de la nueva bisagra es un acierto total, ya que finalmente permite cerrar por completo el teléfono una vez que lo pliegas. En resumen, aunque no se trata de una innovación alucinante en el mercado, es muy importante a niveles prácticos.
En cuanto al diseño, es digno de destacar que, a pesar de ser un dispositivo plegable, es resistente al agua, con una certificación IPx8. Esto significa que no debería haber ningún problema si accidentalmente se te cae al agua.
Hablemos ahora sobre las pantallas del Samsung Galaxy Z Flip5. Los cambios no se limitan a la parte externa, donde la pantalla ha crecido hasta las 3,4 pulgadas y se ha vuelto realmente funcional.
Ahora puedes utilizar aplicaciones como WhatsApp, Maps, YouTube o incluso Netflix con total comodidad. Además, esta pantalla ofrece un impresionante nivel de brillo, alcanzando los 1.900 lux en nuestras mediciones.
Puedes añadir diferentes aplicaciones a la pantalla final de los widgets (siempre que estén ajustadas al tamaño y el funcionamiento). Puede que al principio no encuentres la opción pero es muy sencillo.
Está dentro de "Lab" ese apartado en el que Samsung te permite modificar ciertos aspectos para tener una mejor experiencia de usuario. En este caso, accediendo a las funciones avanzadas de la pantalla externa podrás añadir las aplicaciones a la última tarjeta.
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La pantalla interna del Samsung Galaxy Z Flip5 cuenta con un panel renovado que eleva el brillo máximo a niveles impresionantes.
Esta pantalla de 6,7 pulgadas ofrece la opción de funcionar con una frecuencia de actualización adaptable de hasta 120 Hz, lo que se traduce en una experiencia de visualización increíblemente fluida.
A diferencia del modelo Fold, el Samsung Galaxy Z Flip5 cuenta con una cámara selfie ubicada en la parte superior central, en forma de agujero en lugar de estar debajo de la pantalla.
Además, la funcionalidad de la pantalla externa como preview te llama más a hacerte las fotos de selfie con la cámara externa. Al fin y al cabo es mejor calidad que la interior y puedes hacértelas igual de fácil.
Es evidente que el Samsung Galaxy Z Flip5 presenta una característica destacada que igual no todos saben y llama mucho la atención: es el primer dispositivo tipo Flip en incorporar el Snapdragon 8 Gen 2 for Galaxy.
¿Qué supone esto en el nuevo Samsung Galaxy Z Flip5? Una velocidad de escándalo, tanto para las aplicaciones como para los juegos. Esto sumado a la tasa de refresco hace que la experiencia sea aún mejor.
Probando juegos de RPG, con conexión a internet, de carreras, shooters y de todo tipo no hemos tenido problema alguno. Tampoco utilizando la multipantalla Flex o abriendo varias aplicaciones al mismo tiempo.
En términos de conectividad, Samsung ha realizado se ha lucido al meter el soporte para eSIM y una microSIM 5G, además de Bluetooth y WiFi 6. Y también cuenta con GPS y con NFC, que incluso funciona cuando el teléfono está plegado.
Ahora, respecto al software, el Samsung Galaxy Z Flip5 funciona con One UI 5.1.1 basado en Android 13. Una capa que incorpora los colores clásicos de Samsung y un gran nivel de personalización.
One UI es una capa que a veces puede parecer un poco sobrecargada en comparación con otras, pero todo va en los gustos. A efectos prácticos es ligera, no interfiere mucho en el rendimiento del dispositivo en el día a día.
La pantalla externa ha mejorado significativamente en términos de usabilidad en comparación con la generación anterior. Tienes a tu alcance una personalización de pantallas, widgets y aplicaciones nunca visto antes en los Flip.
Samsung utiliza el "modo Game Booster" para ofrecer un modo No Molestar y mejorar el rendimiento de los juegos, aunque la configuración de esta función se encuentra un poco oculta en la sección "Labs".
Este es un gran punto para Samsung porque te permite tener todos los juegos reunidos y además llevar tu inmersión al máximo sin que nadie más te moleste con un mensaje.
En términos generales, el software ha funcionado de manera fluida, sin cierres forzados ni problema en los momentos que, por ejemplo, abrías la aplicación en la pantalla externa y al desplegar el dispositivo se trasladaba a la interna. Un 10/10.
Es importante destacar que este software permite utilizar el "modo Flex". Este sirve tanto para abrir una aplicación y trasformar la parte baja de la pantalla en un touchpad o directamente dividirla para abrir dos aplicaciones a la vez.
Samsung ha estado mejorando gradualmente las opciones de uso en este modo, incluso permitiendo ejecutar tres aplicaciones al mismo tiempo o adaptando la interfaz de sus aplicaciones para aprovechar esta configuración.
El Samsung Galaxy Z Flip5 no ha traído una gran novedad en cuanto a la fotografía, ya que conserva la misma configuración que su predecesor del año pasado. Por si algo funciona bien, ¿para qué cambiarlo? Y por eso mismo se han centrado en mejorarlo con otras funciones.
Sin embargo, es un dispositivo que ofrece un buen rendimiento y aporta versatilidad gracias al innovador modo Flex, que utiliza la pantalla externa como visor.
En cuanto a las cámaras externas, encontramos dos sensores de 12 Mpx en una configuración que incluye un objetivo ultra gran angular y un objetivo gran angular. Puedes usarlas tanto en interiores como en exteriores, con cielos despejados, nublados o lloviendo, siempre saca buenas fotos.
Es cierto que, como señalamos, no tiene avances significativos en términos de hardware en comparación con el modelo del año pasado. Sin embargo gracias a las mejoras notables provienen principalmente del software, se aprovecha la mayor potencia del procesador de señal de imagen (ISP).
Esto se traduce en la capacidad de capturar fotografías de alta calidad incluso en condiciones de poca iluminación o contraluz con el sensor principal de 1X.
Además, cuenta con un modo "Noche" que ilumina muy bien las imágenes aunque la noche esté oscura. Con aguantar durante dos o tres segundos consigues una gran fotografía en la que las farolas o luces externas no destellan demasiado.
Y si quieres grabar vídeo no hay problema alguno. El Samsung Galaxy Z Flip5 tiene la capacidad de grabar vídeos con una resolución de hasta 4k a 60 fps (en el caso de la principal).
Mientras tanto, con la ultra gran angular tienes la opción también de grabar con calidad 4K, pero en este caso a 30 fps. Aun así, sigue siendo una calidad más que buena para una cámara ultra gran angular.
La cámara selfie es mucho mejor de lo esperada. Teniendo en cuenta cómo son este tipo de cámaras en otros móviles plegables, la del Samsung Galaxy Z Flip5 tiene una gran calidad, tanto en el modo normal como el retrato.
Aun así, como señalamos, lo más fácil es hacerte las fotos directamente desde la cámara principal gracias al visor de la pantalla externa. No tienes que abrir el dispositivo, es de buena calidad y es más rápido, no tiene fallo.
Por supuesto, con este sensor puedes capturar vídeos en calidad 4K a 60 fps, y su desempeño es excelente. De hecho, uno de los aspectos destacados en la estrategia de marketing de Samsung es lo que ellos llaman "nightography".
La autonomía del dispositivo es suficiente para un día completo, aunque si le das bastante uso igual tienes que cargarlo después de cenar. Samsung ofrece opciones de ahorro de energía para este teléfono para que gestiones mejor tu batería.
Por defecto, el teléfono viene en un modo normal. A diferencia de otros dispositivos que tienen un modo de rendimiento mejorado, este incorpora un perfil llamado "Ligero" que se centra en el ahorro de energía.
Es evidente cómo Samsung, aprovechando la potencia del Snapdragon 8 Gen2 y su optimización de software, saca el máximo provecho de los 3,700 mAh de capacidad de la doble batería de este smartphone.
El Samsung Galaxy Z Flip5 es capaz de cargar a una velocidad de hasta 25W (con un cabezal adecuado) y su conexión es USB-C, de hecho el cable viene con los extremos USB-C.
Para poder disfrutar de esta carga rápida de 25W, tendrás que comprar un cargador compatible por separado, de esta forma te aseguras que se cargue de forma correcta y mantienes la salud de tu batería.
Además, este smartphone es compatible con la carga inalámbrica de 10W y puede proporcionar carga inalámbrica inversa de casi 5W, lo que es útil para cargar dispositivos como auriculares.
En resumen, el Samsung Galaxy Z Flip5 ha sorprendido con su gran pantalla externa en cuanto a diseño. Mientras que la demás parte del hardware no es algo supernuevo, todo el trabajo del software se ha notado y mucho en la experiencia de uso.
Samsung ha trabajado en hacer esta pantalla más intuitiva, lo que resulta útil en situaciones como usar Maps o responder rápidamente a notificaciones sin necesidad de abrir el teléfono.
La pantalla interna se ve bien, tiene un gran brillo y se abre al completo. El apartado multimedia está muy completo al contar también con buenos altavoces, aunque a veces puede solaparse un poco al agarrar el móvil con las dos manos.
La duración de la batería es aceptable, aunque sería el punto más "flojillo", y el sobrecalentamiento también falla un poco. Aun así, todo esto pasa por alto cuando empezamos a hacernos fotos con el teléfono plegado y disfrutamos al máximo de la calidad de sus cámaras.
Si a todo esto le sumas la potencia del Snapdragon 8 Gen 2 for Galaxy, pues ya tienes un móvil todoterreno. Ahora ya queda en tu mano si te pasas a la gama más alta con el Samsung Galaxy Z Flip5 o prefieres el también increíble Samsung Galaxy Z Fold5 que probamos aquí. 😎
